WaloPay es una plataforma de transacciones digital para pagos seguros que te protege de estafas cuando realizas una transacción con alguien que no conoces.
¿Ya te pasó tener que pagar por adelantado algo? ¿Contratar un servicio y confiar a que lleguen? ¿O vender algo y después no te pagan?
Nuestra solución fue diseñada para darte tranquilidad cada vez que realices una compra o venta online o en persona con alguien que no conoces.
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¿Cómo funciona?
WaloPay gestiona toda la transacción con un enfoque “práctico”. Al gestionar todo el proceso, WaloPay ofrece a los usuarios algo más que una solución de pago.
En una transacción típica, el comprador paga el precio de un artículo en la cuenta de Walo. A continuación, los fondos se liberan al vendedor en función del cumplimiento de determinados hitos, como la entrega de un artículo o la entrega de un artículo en persona.
El comprador y el vendedor están completamente protegidos de fraudes o estafas al retener los fondos hasta que se cumpla exitosamente la transacción.
Caso el producto no haya sido entregado o el servicio prestado, el comprador puede solicitar el reembolso del valor.
Disponible en todas las plataformas
Único, flexible y de bajo costo, WaloPay es compatible con todas las plataformas. La puedes usar desde cualquier dispositivo latpop, tablet o smartphone, para realizar tus transacciones con total tranquilidad.
Al utilizar WaloPay, puedes por fin realizar transacciones en línea o en persona con confianza. Ya no es necesario preocuparte por comprar algo a un completo desconocido.
Pagos seguros para el comprador
Una cuenta de WaloPay es clave para hacer tus pagos seguros en la compra de un artículo o recibimiento de un servicio. Por ejemplo, supongamos que se ha llegado a un acuerdo de compra de un vehículo, pero la venta fracasa debido a un problema detectado en el vehículo. Si se hubiera entregado el dinero o un depósito directamente al vendedor, existe la posibilidad de que éste no te lo devuelva. Pero como el depósito está en manos de un tercero, puedes estar seguro de que se te devolverá según lo acordado.
Garantía para el vendedor
Desde el punto de vista de quién vende o es proveedor de servicios, la posibilidad de tener un depósito custodiado, es un gran generador de confianza para sus clientes. Además, permite garantizar que se cobrará el artículo vendido o el servicio prestado. Por ejemplo, en el caso de un proveedor de servicios. Es común solicitarse un adelanto o depósito antes de la prestación del servicio, pero no existe la seguridad de que, una vez completado el servicio, se reciba en la totalidad el valor acordado. Teniendo el depósito en custodia por parte de un tercero, ayuda a garantizar el pago por los servicios prestados o artículos vendidos.
